En la alta cocina, se valora mucho el uso de ingredientes frescos, de temporada y de alta calidad. Las frutas y verduras son elementos fundamentales en la cocina de alta gama, ya que aportan sabor, textura, color y aroma a los platos.
Entre las frutas más valoradas en la alta gastronomía se encuentran las fresas, los arándanos, las frambuesas, los mangos, los higos, los melocotones y los aguacates. Estas frutas se utilizan tanto en platos dulces como salados, aportando un toque de acidez, dulzura o frescura según el caso.
En cuanto a las verduras, algunas de las más imprescindibles son los tomates, los espárragos, los pimientos, los calabacines, las alcachofas, los espárragos trigueros y las berenjenas. Estas verduras pueden servir como guarnición, como base para salsas o para dar un toque de frescura y color a los platos.
Además, cada vez es más frecuente el uso de verduras y frutas en platos principales y en preparaciones más elaboradas, como el carpaccio de piña, el risotto de espárragos, el gazpacho de fresas o el tartar de aguacate.
En definitiva, las frutas y verduras son elementos fundamentales en la alta gastronomía y su uso adecuado puede marcar la diferencia en la calidad y el sabor de los platos.
A éstos productos se suman además el uso de hongos y setas por la textura, matices y aromas que pueden aportar a un plato.